Corriendo mejor, de la cabeza a los dedos del pie
Inclinación de la cabeza
La manera como sostiene su cabeza es la clave de la postura general que determina cuan eficientemente corre. Permita que su mirada le guíe. Mire hacia adelante de forma natural, no abajo a sus pies, y examine el horizonte. Esto mantendrá derecho a su cuello y a su espalda, y les alineará. No deje que su mentón sobresalga.
Hombros
Los hombros juegan un papel importante para mantener la parte superior del cuerpo relajada, lo que resulta crítico para conseguir un postura eficiente. Para un óptimo desempeño, sus hombros deben estar bajos y sueltos, no altos y tensos. Cuando se sienta cansado mientras corre, no deje que se acerquen a sus orejas. Si eso pasa, sacúdalos para liberar la tensión. Sus hombros también necesitan mantener el nivel y no deberían balancearse de lado a lado con cada tranco.
Brazos
Aunque correr es ante todo una actividad de la parte inferior del cuerpo, sus brazos no están solo para acompañarle durante el recorrido. Sus manos controlan la tensión en la parte superior del cuerpo, mientras el balanceo de los brazos trabaja en conjunción con el tranco de la pierna para llevarlo hacia adelante. Mantenga sus manos en un puño suelto, con sus dedos tocando ligeramente sus palmas. Imagínese llevando una papa frita 'chip' en cada mano sin romperla. Sus brazos deberían balancearse generalmente adelante y atrás, no a través de su cuerpo, entre la cintura y la parte baja del pecho. Sus codos deberían doblarse alrededor de un ángulo de 90 grados. Cuando sienta que sus puños se aprietan o que sus antebrazos se tensan, deje caer los brazos a los lados y sacúdalos por algunos segundos para liberar la tensión.
Tronco
La posición de su tronco mientras corre se afecta por la posición de la cabeza y de los hombros. Con su cabeza alta mirando al frente y sus hombros bajos y sueltos, el tronco y la espalda se enderezan de forma natural para hacerle correr en una posición eficiente y vertical que fomenta un capacidad pulmonar óptima y un tranco largo.
Muchos entrenadores describen esta posición ideal del torso como "correr alto" y eso significa que necesita estirarse hacia arriba a su máxima altura con su espalda confortablemente derecha. Si empieza a encorvarse durante la carrera realice una respiración profunda y siéntase naturalmente vertical. Al exhalar simplemente mantenga la posición erguida.
Cadera
Su cadera es el centro de gravedad, y por lo tanto la clave de una buena postura para correr. La posición apropiada del tronco mientras corre ayuda a asegurar que su cadera también esté en posición ideal. Con su torso y espalda confortablemente erguidos su cadera estará naturalmente en una alineación apropiada --apuntando directamente hacia adelante. Si deja que el tronco se encorve o incline demasiado hacia adelante durante la carrera, su pelvis también se inclinará, lo que puede colocar presión en su espalda baja y llevar al resto de la parte inferior del cuerpo fuera de alineación. Cuando trate de corregir la posición de su cadera, piense que su pelvis es un recipiente lleno de canicas, y luego trate de no derramarlas por inclinar el recipiente.
Piernas/tranco
Mientras los velocistas necesitan levantar sus rodillas lo más alto para conseguir la máxima potencia de las piernas, los corredores de distancia no requieren levantarlas exageradamente --simplemente es muy duro sostenerlas altas por demasiado tiempo. En lugar de eso, una eficiente carrera de resistencia necesita solamente un ligero levantamiento de rodillas, un rápido movimiento de piernas, y un tranco corto. Todos éstos juntos facilitarán un movimiento fluido hacia adelante en lugar de desviar (y desperdiciar) energía. Cuando se corre con la apropiada longitud de tranco, sus pies deberían caer directamente debajo de su cuerpo. Cuando el pie golpea el piso, su rodilla debería estar ligeramente flexionada para que pueda doblarse naturalmente durante el impacto. Si la parte inferior de la pierna (debajo de la rodilla) se extiende adelante de su cuerpo, su tranco es demasiado largo.
Tobillos/pies
Para correr bien necesita empujar el piso con la mayor fuerza posible. Con cada paso, su pie debería topar el piso ligeramente -- aterrizando entre el talón y la parte media del pie -- y luego rápidamente empujar. Mantenga el tobillo flexionado mientras se realiza el empuje hacia adelante para crear la mayor fuerza de despegue. Al llegar a los dedos del pie, trate de despegarse del suelo. Debería sentir que los músculos de las pantorrillas le impulsan en cada paso. Sus pies no deberían golpear sonoramente el piso. El buen estilo de correr es elástico y silencioso.
empece a trotar y me dolian mucho los pies .entre a esta pagina y voy a aplicar todo lo que lei.gracias por estar ahi
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