Artículo original: The Mindfulness Guide for the Super Busy: How to Live Life to the Fullest (Leo Babauta/Zenhabits)
"Sonría, respire y vaya despacio". –Thich Nhat Hanh, Zen Buddhist monk
La idea de ser consciente –estar presente, ser más consciente de la vida mientras pasa– parece algo imposible para los súper ocupados.
Pero no solo que es posible, diría que es necesario, y que ayudará a los ocupados (y no ocupados) a conseguir sus metas y a disfrutar la vida de forma más completa
"¿Tiene paciencia para esperar que pase la tormenta y que el agua se aclare? ¿Puede permanecer inmóvil hasta que la acción correcta surja por sí sola?" – Lao Tzu
1. Haga una cosa a la vez. Una sola tarea, no multi-tarea. Cuando esté regando el agua, solo riegue el agua. Cuando esté comiendo, solo coma. Cuando se esté bañando, solo báñese. No trate de cumplir varias actividades mientras come, se baña o maneja. Proverbio Zen: "Cuando camine, camine. Cuando coma, coma".
2. Hágalo deliberadamente lento. Puede realizar una tarea a la vez, pero también puede realizarla al apuro. En lugar de eso, tome su tiempo y muévase de forma lenta. Realice sus acciones de manera deliberada, sin apuro y al azar. Requiere práctica, pero le ayuda a enfocarse en la tarea.
3. Haga menos. Si hace menos, puede realizar las cosas de manera más pausada, más completa y con más concentración. Si llena el día con tareas, estará corriendo de una cosa a otra sin pararse a pensar sobre lo que hace. Pero usted es ocupado y difícilmente puede hacer menos ¿no es verdad? Si puede. Lo he hecho al igual que muchas personas ocupadas. Solo se debe descubrir lo que es verdaderamente importante y dejar ir lo que no.
4. Coloque espacio entre las cosas. Esto está relacionado con el "hacer menos", pero es una forma de manejar su horario para que siempre tenga tiempo para completar cada tarea. No programe las cosas juntas – en lugar de eso, deje espacio entre ellas. Eso le permite tener un horario más relajado y le deja espacio en caso de que alguna tarea demore más de lo planeado.
5. Pase al menos 5 minutos del día haciendo nada. Solo siéntese en silencio. Esté alerta a sus pensamientos. Enfóquese en su respiración. Sea consciente del mundo a su alrededor. Siéntase cómodo con el silencio y la tranquilidad. Le ayudará muchísimo – y solo le toma 5 minutos.
6. Deje de preocuparse por el futuro – enfóquese en el presente. Esté mas alerta a sus pensamientos – ¿se preocupa constantemente de sus pensamientos? Aprenda a reconocer cuando lo está haciendo y practique regresar al presente. Solo enfóquese en lo que está haciendo en este momento. Disfrute el momento.
7. Cuando hable con alguien, esté presente. ¿Cuántos de nosotros pasamos nuestro tiempo con alguien pero estamos pensando en lo que necesitamos para el futuro? ¿O pensando en lo que vamos a decir después en lugar de escuchar realmente a esa persona? En lugar de eso, enfóquese en estar presente, en escuchar realmente y en disfrutar el tiempo con esa persona.
8. Coma más despacio y saboree su comida. La comida puede pasar por nuestra garganta rápidamente, pero ¿dónde está la dicha de hacer eso? Saboree cada mordisco, lentamente y consiga lo que más pueda de su alimento. De forma interesante, comerá menos de esta manera y también su digestión mejorará.
9. Viva lentamente y saboree la vida. Así como puede saborear su comida al comer más despacio, hago todo de esa manera – reduzca la velocidad y saboree cada momento. Mientras escribo esto, por ejemplo, tengo a mi pequeña hija de tres años en mis rodillas. Está sentada quietita mientras afuera llueve. Qué hermoso momento. De hecho, voy a tomarme unos pocos minutos para estar con ella. Ya regreso. :)
10. Haga que la limpieza y la cocina sean momentos de meditación. Cocinar y limpiar son vistos como trabajos pesados, pero en realidad son dos grandes maneras de practicar la consciencia y pueden ser buenos rituales a realizar cada día. Si cocinar y limpiar parecen ser tareas aburridas para usted, trátelas de hacer como una forma de meditación. Coloque a toda su mente en esas tareas, concéntrese y hágalas de forma lenta y completa. Podría cambiarle su día (además de tener una cada limpia).
11. Practique. Cuando se frustre, solo respire profundamente. Cuando se pregunte ¿Y ahora que hago?, la respuesta es "practique".
"Cuando maneje por la ciudad y se tope con una luz roja o una señal de pare, puede usar esos veinte o treinta segundos para relajarse – para inspirar, expirar y disfrutar llegar a ese preciso momento. Hay muchas cosas como esa que podemos hacer". – Thich Nhat Hanh
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