Artículo original: The world's worst boss (Seth Godin)
Ese podría ser usted.
Aunque sea independiente, su jefe es usted. Usted dirige su carrera profesional, su día, sus respuestas. Usted dirige como vende sus servicios y su educación y la forma como se habla a usted mismo.
Las probabilidades son, que lo esté haciendo pobremente.
Si tuvo un gerente que le habló a usted de la forma que usted se habla a si mismo, debería renunciar. Si tuvo un jefe que desperdició tanto tiempo como usted lo hace, le deberían despedir. Si una organización desarrolló a sus empleados de una manera tan pobre como usted se está desarrollando a usted mismo, se hundirá pronto.
Estoy sorprendido de la frecuencia con que la gente escoge fracasar cuando sale por su propia cuenta o cuando terminan en esos trabajos raros que le desafían a uno a organizarse y dirigirse a uno mismo. Enfrentados con la libertad para superarse, titubean, vacilan, se estancan y por último la evitan.
Nos sorprendemos cuando alguien que se autodirige se presenta en escena. Alguien que descubrió una forma para trabajar desde casa y que luego se transforma en una jornada de dos años, con la laptop en la mano, descubriendo el planeta mientras realiza su trabajo. Entramos en shock si alguien usa las noches y los fines de semana para conseguir una segunda educación o empezar un nuevo y útil negocio. Y nos ponemos envidiosos cuando nos encontramos con alguien que logró ser feliz, como si eso fuera raro o inclusive no buscado.
Hay muy buenos libros para ser buen gerente. Algunos para dirigirse a uno mismo. Es difícil pensar en una cosa más esencial por aprender.
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