Artículo original: Think Like a Dandelion
Los lectores regulares de Locus habrán notado un item reciente en la portada del libro sobre mi reciente Good News (Buenas Noticias), una pequeña hija llamada Poesy, que nació el 3 de febrero de 2008. Este acto de nanoingeniería –acompañado en su mayoría de mi Alice, con el valor de 23 cromosomas de asistencia programada – me ha llevado a pensar acerca de la reproducción, más allá de lo usual.
Los mamíferos invierten mucha energía en registrar la disposición de cada copia que engendramos. Es natural, por supuesto, que invertimos tanta energía y tantos recursos en nuestra prole y que sería un gran desperdicio si estuvieran vagando por ahí y desaparecieran en el depósito de basura. Estamos diseñados, como mamíferos, para ver esta clase de desgracia como una tragedia moral, un trauma masivo de nuestra psique tan profundo que algunos nunca nos recuperamos.
Es natural que demos mucha importancia en la disposición individual de cada copia de nuestros trabajos artísticos también, retorciendo nuestras manos por las copias de revisión adelantadas "no para la venta" que aparecen en Amazon y jalando nuestras barbas al pensar que Google escaneará nuestros libros para indexarlos para los buscadores. Y mientras imprimir un libro no es tan complicado como crear a un bebé, no hay vueltas que dar al hecho que cada copia impresa es dinero gastado y que cada copia vendida sin ser contabilizada es dinero que nos quitan.
Existen otros organismos con otras estrategias de producción. Considere al diente de león: un solo diente de león puede producir 2.000 semillas al año, disparadas de manera indiscriminada hacia el cielo ante la más ligera brisa, sin cuidado alguno de donde van a parar y si éstas conseguirán un recepción hospitalaria cuando caigan.
Y sin duda, la mayoría de esas miles de semillas caerán en pavimento duro donde no serán consumidas, una falla en la carrera genética para sobrevivir y copiar.
Pero la disposición de cada una – o de la mayoría – de las semillas no es lo importante, desde el punto de vista del diente de león. La cosa importante es que cada primavera, cada grieta del pavimento es llenada con dientes de león. El diente de león no quiere cuidar a cada copia preciosa de el mismo en la esperanza que dejará el nido y navegará cuidadosamente su camino hacia un ambiente de crecimiento óptimo, para allí perpetuar la línea ¡El diente de león solo quiere estar seguro de que cada simple oportunidad de reproducción sea explotada!
Los dientes de león y los artistas tienen mucho de común en la era de Internet. Esto es, por supuesto, la era de lo ilimitado y del costo marginal cero por copiado. Si difunde su trabajo por la Red como lo hace el diente de león con la brisa, el nido mismo se encargará de los costos de copiado. Sus seguidores copiarán su trabajo en la lista de direcciones de su correo electrónico, realizando 60.000 copias tan rápido y tan barato que descubrir cuanto costará agregar hacer todas esas copias se conviertan en órdenes de magnitud más caras que las mismas copias.
Lo que es más, los vientos de Internet lanzarán sus trabajos a cada esquina del globo, buscando por un hogar fértil que los pueda acoger – dado el tiempo suficiente y el trabajo correcto, su material podría algún día encontrar su camino hacia un lector que podría considerarlo bueno y agradable. Después de todo, la mayoría de enlaces entre los diferentes blogs han sido hechos hacia y desde blogs con cuatro o más enlaces internos en total –eso significa que Internet ha descubierto medios de costos efectivos para ayudar a las audiencias de tres personas ha descubrir a los escritores que deberían estar leyendo.
Así, estipulemos si quiere producir como un diente de león y dejar atrás a los mamíferos ¿Cómo lo hace?
Hay dos factores críticos para el éxito del diente de león:
- Su trabajo necesita ser fácilmente copiado, hacia donde sea que puede encontrar llegar a las manos adecuadas. Eso significa que el archivo de texto, archivo HTML o PDF (el triunvirato preferido de los formatos) debería ser distribuido sin formalidad – sin 'logins', sin colecciones de direcciones de correo electrónico y sin una licencia que permita a sus seguidores reproducir el trabajo en su propio orden para compartirlo con seguidores más potenciales. Recuerde, copiar es un centro de costo – insistiendo que todas las copias deben ser descargadas de su portal y solamente su portal está insistiendo en que usted – y solo usted – aguantará el costo de hacer copias. Seguro, tener un repositorio simple y central para sus trabajos hace fácil contar las copias y descubrir a donde van, pero recuerde: los dientes de león no llevan un registro de sus semillas. Una vez que supere la vanidad de saber exactamente cuantas copias han sido hechas y encuentre el zen del conocimiento de que las copias se cuidarán ellas mismas, conseguirá satisfacción diente leonesca.
- Una vez que su trabajo llegue a las manos correctas, necesita una forma fácil para consumar la relación. Un amigo que tiene una pequeña imprenta me escribió recientemente para preguntar si pienso que debería sacar su próximo libro como una descarga gratuita 'Creative Commons' previa a su publicación, como una estrategia publicitaria antes que el libro vaya a la venta. Le expliqué que pensaba que sería realmente una mala idea. Los usuarios de Internet tienen espacios cortos de atención. El momento de la consumación – el momento en el cual el lector descubre su libro en línea, lo empieza a leer, y piensa, debería comprar una copia de este libro – es muy breve. Eso se debe a que "debería comprar una copia de este libro" es inevitablemente seguido por, "Guau, ¡un youtube de un hombre colocándose un limón en la nariz! y el momento se fue.
Conozco de eso por un hecho. Reviso muchos libros en Boing Boing, y en cualquier momento que lo haga, realizo un enlace a la página de Amazon para el libro, usando mi identificación de afiliado en el URL. Si sigue uno de esos enlaces y compra el libro, tengo una comisión –cerca del ocho por ciento. Puedo usar la herramienta de reporte de Amazon para decir exactamente cuanta gente usa mis enlaces, y cuántos de ellos compraron el libro, y aquí está la cosa: cuando realizo el enlace de un libro que saldrá pronto, disponible como pre-orden, obtengo menos del diez por ciento de las ventas que obtengo cuando enlazo a libros que ya están a la venta. Nueve de diez lectores de Boing Boing que compran los libros basados en mi revisión no quieren pre-ordenar un título y esperar para verlo más tarde.
La Red es un AHORA sin fin de momentos, distracciones, maravillas, rompecabezas y modas. Pedir a alguien que está siguiendo su corriente que se comprometa en un baile complejo antes que pueda darle su dinero es una proposición errada. Los diseñadores de interaces de usuario hablan de como cada click adicional entre el pensamiento y la acción poda un gran número de semillas en su carrera por germinar.
En mi próxima columna, "Macropagos", escribiré más sobre esta acción de consumo, para esto es la clave para mantener el éxito como un diente de león. Aquí está lo esencial: gaste menos esfuerzo buscando asegurar que pequeñas sumas de dinero sean sacadas de sus seguidores por copias individuales de su trabajo, y enfóquese en conseguir pagos más grandes, haciendo que cada germinación cuente para algo más que el dinero de las regalías.
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